This Boy...#139


-A Alison, ¿no le dirás que la quieres?
-¿Qué? No.
-¿Por qué?
-Porque no le veo el caso John, no me gustaría que las cosas terminaran como pasó entre su triángulo amoroso. La quiero, bastante y tiernamente, pero tenemos ahora una buena relación, tranquila, sin insultos ni malos entendidos ¿para qué arruinarlo?
-Hoy mientras los observaba, pensé que lucen bien juntos, me refiero a que parecen entenderse bien, son un mundo completamente distinto.
-Gracias John pero...
-No lo dije para convencerte, es porque debes saberlo, pienso... que quizá Alison también se siente atraída a ti y no me refiero a algo sexual, creo que te toma bastante en serio y es muy distinta contigo, te tiene mucho respeto y paciencia, como esperando conocer irónicamente, ansiosa, todas tus facetas. Le eres interesante.
-No lo había pensado...
-Piénsalo, sin importar lo que decidas hacer.
-Entiendo... bien, gracias por la plática John y por ser tan empático respecto a esto, pese a ser “su” Alison- dijo riendo
-Stuart, ella podría estar con cualquier idiota, mejor que sea contigo, aunque sea como amigos.
-Nos vemos John
-Hasta luego amigo- ambos se despidieron y se dieron un abrazo y llegaron a sus hogares.
Dicho y hecho para el jueves de esa semana, todos nos encontramos en la casa de Paul (la que hace tiempo no visitaba) él me saludó gustoso y yo lo abracé con tanto gusto y entusiasmo, besé sus mejillas y las apreté.
-¡Enano del demonio, te extrañé tanto!- él comenzó a reírse
-La única enana aquí eres tú Alison. También te extrañé- él me despeinó aprovechando la ventaja de su estatura.
-Me alegra mucho volver a salir con ustedes y especialmente, que ustedes salgan con mis amigas, me hace feliz que hagas feliz a Sofi.
-Es lo menos que puedo hacer por una mujer tan linda y tierna como ella, Alison. Tiene la sonrisa y las ocurrencias más hermosas, me gusta que me haga reír tanto y que ella parezca satisfecha con mi compañía... me gusta sentirme así- dijo lleno, regocijante y no podía sentirme más feliz por él, siendo un chico tan encantador, merecía eso y más. Pronto saludé a Sofía quien se veía bastante contenta, después se acercó a Paul quien le dio un tierno beso y una delicada caricia en el mentón, se tomaron de la mano y esperaron junto con Oliver y conmigo a los demás. Pronto Llegó Stuart junto con John, nos saludaron a todos y acomodaron sus abrigos en la cajuela junto con las cosas de los demás; al final llegaría, casi corriendo un Harrison un poco agotado, hizo lo mismo que los dos antes mencionados y después subimos a la camioneta de Paul para pasar por Michelle y tomar camino...

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