This Boy...#142

-Hija, disculpa estar siendo tan insistente con las cartas y las llamadas. Te tengo nuevas noticias, en pocas semanas partiremos y el lugar será sorpresa.

-¿Cómo que sorpresa? ¿En cuántas semanas?

-Pronto te lo diré, ahora sólo quiero que atiendas los asuntos de la lista que te envié ¿de acuerdo? Descansa hija, te quiero...

Lugares sorpresa y salidas espontáneas, nada podía ser más producto que las ocurrencias de mi madre, ahora estaba confundida y nerviosa, ¿a dónde demonios nos iríamos? ¿Por qué en semanas? No estaba preparada, menos ahora que las cosas iban demasiado bien. Aquello no duró tanto cuando a punto de dormir recibí una segunda llamada.

-¿Sí?

-Alison, habla Stuart

-Ya lo sé... ¿qué pasa?- contesté sonriente

-Hablo para invitarte a una fiesta con tema de los años veinte y treinta, habrá un concurso de disfraces y baile, pienso que podríamos ganar cualquiera de ambos.- se escuchaba entusiasmado y divertido

-¿De verdad? Me encantaría, ¿Qué han dicho los demás?

-¿Los demás?... amm, esta invitación sólo te la he hecho a ti

-Oh entiendo... ya entiendo. Genial, vayamos, pienso que los demás no lo apreciarían tanto.

-No, no lo harían- soltó una risita

-Bien ¿a qué hora será?

-A las ocho inicia todo, ¿te parece si paso 7:30 a tu casa?

-Claro. 7:30 entonces, hasta mañana Stu.

-Adiós Alison- él colgó y yo pensaba en la manera tan peculiar que tenía él para decir mi nombre.

Así, al día siguiente, casi reventando de emoción, me levanté de buenas por la grandiosa noche que pasaría disfrazada, obviamente de Clara Bow,  Oliver se reía de mi entusiasmo y mi tía me ayudaría con el peinado y el maquillaje, ella también estaba fascinada con aquella época, así que me compró un vestido del que de haber sido legal, me habría casado con él.

Para la tarde noche comencé con el ritual de embellecimiento, según mi tío; tomé un baño y al salir me puse mi bata, puse mi ropa sobre la cama y sequé mi cabello, una vez bien seco mi tía comenzó a rizarlo con tubos delgados para posteriormente hacer más fácil el peinado con las tenazas; mientras esperábamos comenzó a maquillarme y le pedí que la ceja no la hiciera tan delgada como “línea de bolígrafo” ya que no soportaría las burlas de Stuart, sólo pedí que les diera un color un poco más claro. El maquillaje debía ser un poco más blanco y más dramático en los ojos, usé labial de un rojo “quemado”, dándole un protagónico a mis labios tanto como a mis ojos; mi tía estaba tan entusiasmada que puso en su tocadiscos a Annette Hanshaw y yo ya me metía en mi papel.

Al finalizar el hermoso maquillaje y casi caracterización a la Clara Bow, pasamos con las tenazas reproduciendo exitosamente aquel ondulado tan característico de las cabelleras de la década y una vez listo ese asunto giré para observar enamorada mi ropa cortesía de mi tía y pronto me enfundé en aquel vestido plisado de cintura “natural” (holgada), cuello-O, manga corta y tejido transparente en esa parte de los hombros y clavículas que tenían los toques de los encajes delicados del vestido...