Thank You Girl... (2° Parte)
-Ella dijo
que en vista de lo ocupada que estaba, más lo extensa que se estaba tornando la
historia, probablemente vendría a buscar una editorial por estas fechas.
-Entonces...
¿ella está aquí?- pregunté entusiasmado. Al fin, después de cuatro largos años
volvería a verla.
-No, no en
realidad- contestó Oliver brevemente
-¿No ha
terminado el libro?- Pregunté extrañado
-Ella tuvo
un accidente- contestó serio y en seguida me alarmé
-¿Qué y cómo
está? ¿En qué hospital se encuentra?, puedo decirles a los chicos para
reunirnos e ir a visitarla. Podemos posponer el viaje a Liverpool.- Reaccioné
nervioso y asustado. Oliver y yo estábamos de pie porque nos levantamos por más
vino, por lo cual estábamos frente a frente; él dio un paso hacia enfrente
mirando el suelo, suspiró y me miró en seguida. Sinceramente aquella mirada que
él me dedicaba la había visto antes... cuando nos encontramos con Astrid en el
aeropuerto de Hamburgo, ese semblante indescriptible aparecía en Oliver esta
vez.
-George...-
dijo observando el vino dentro de su vaso, tocó su rostro y después pasó su
mano izquierda por su cabello.
-¿Qué pasa?-
más que duda, exigía una respuesta.
-Alison no
está en ningún hospital...
-¿Qué?- mi
gestó delató la incredulidad
-Eso fue en
abril... de hace dos años.
-¿Me estás
jodiendo?
-No George,
sólo quiero que comprendas
-¿Qué cosa
Oliver?-Me dedicó una mirada cuya profundidad de sentimientos lo mantenían
mudo, hasta que al fin dijo...
-Alison
falleció, George. Hace dos años, sólo unos días después de que Stuart lo
hiciera también, lo supe al ver la fecha en que mencionaste que fue su deceso.
Lo lamento, habría enviado una carta pero con las giras no sabía cómo
encontrarlos, además tuve que acompañar a su madre por un largo tiempo a tomar
terapias y me desconecté del mundo entero. Ha sido difícil George, muy
difícil.- Oliver poco a poco enmudeció y yo estaba en completo shock, me
congelé, me senté de golpe en el sillón que tenía detrás de mí, dejé el vino en
el suelo y recargué mis brazos sobre mis muslos para dedicarme a perder mi
vista y consciencia en mis manos sin fuerza.
Aquel
sentimiento inefable de pérdida fue cavando un vacío que se sentía como un
agujero negro en mi interior, la impotencia y una rara energía recorrieron mi
cuerpo comenzando por los brazos y extendiéndose hasta la boca de mi estómago.
¿Por qué ella? ¿Por qué Alison siendo una persona tan ejemplar? Siendo una
persona tan amada, talentosa y con muchas cosas por conseguir, como conquistar
al mundo, por ejemplo. No podía ser, ella era imparable, fuerte, determinada,
la mujer con más vivacidad que había conocido; la más inteligente y más hermosa
sin duda alguna. ¿Por qué ella?.
-¿Cómo
sucedió?
-Iba en un
autobús de camino a Navarra, fue invitada por Serrat y ex compañeros a dar un
recital en beneficio a las personas afectadas del lugar. Unas horas antes de
salir me llamó emocionada por participar en un evento así, llevaba su cámara
para tomar fotografías y mostrarme cuán hermoso era el lugar ya que había
prometido venir a visitarme después de ese viaje. El autobús derrapó en una
curva muy cerrada, fue casi a mitad de camino.- contestó un Oliver que secaba
sus lágrimas y aclaraba su garganta cada vez que sentía que el llanto le
ganaba. Mis lágrimas recorrían mi rostro y mis ojos estaban tan tristes como mi
alma, aunque no sollozaba ni era preso de una expresión desoladora o una
reacción alterada, me encontraba tan deshecho que apenas podía respirar.
-¿Dices que
estuvo en el hospital?
-Sí. En
cuanto sus padres fueron notificados del accidente, la trasladaron a un
hospital privado de Barcelona. Mis padres y yo salimos de inmediato a Barcelona
y al llegar al hospital nos dijeron que ella descansaba, hasta que pude hablar
con ella; no parecía estar tan grave, tenía un brazo vendado, una pierna rota y
unas cuantas costillas...
-Por favor-
dije moviendo mi mano pidiendo que omitiera la descripción, no quería imaginar
a Alison de ese modo.-¿Qué te dijo?
-Ella sonrió
pasiva, me saludó y bromeó diciendo “aún me veo guapa, lo sé”, eso al notar mi
mirada. Me contó cómo sucedieron las cosas y después para distraerla le dije
que debía reponerse para que pudiéramos ir a algún concierto de ustedes,
incluso ella escuchaba el “Please, please me” en ese momento y los recordamos y
se entusiasmó. Después mencionó algo curioso...- Oliver parecía hilar hasta ese
momento las palabras de Alison con los hechos.
-¿Qué cosa
dijo?
-Me dijo que
en la noche había soñado con Stuart, dijo que fue raro porque ambos estaban
sentados en esa cama del hospital como si ninguno estuviera herido...
-¿Qué más?-
pregunté un poco sorprendido
-Stuart le
decía que ambos debían irse de ahí porque las pastillas y las persianas no les
permitirían ver la puesta del sol y cuando ambos voltearon hacia la ventana
justo el sol se estaba poniendo: “¿Ahora?” ella preguntó, “Sí, ahora” él
contestó para tomar su mano y en seguida despertar de aquel sueño.- Yo comencé
a llorar de nuevo, con sollozos de niño, frotando mi cara con mis manos.
-¿Te das
cuenta...?- apenas pude decir
-Ella sonrió
cuando terminó de contarme aquello y dijo que lo más prudente sería enviarle
una carta, ya que seguramente había ido a molestarla en sueños porque ella
tenía tiempo de no comunicarse con él y yo... simplemente no pude decírselo, no
tuve el valor para contarle que Stuart había fallecido sólo dos días antes a
ese.- Oliver luchaba contra el llanto, al darle un significado a todo lo hizo
llorar tanto como a mí ¿cómo todo eso podía ser posible?
-Alison
comenzó a escribir una carta y yo salí a fumar para contener mis emociones,
ella estaba tan esperanzada que pensé que no era el momento ni lugar indicado
para decírselo. Cuando volví una enfermera estaba cambiándole el suero y ella
colocó la carta sobre la mesa donde le servían la comida. “Ahora debes
descansar, estás muy agotada ya, recuerda que no debes esforzarte demás” dijo
en un tono cariñoso la enfermera y Alison se recostó, quitaron la mesa de
encima y ella se quitó el anillo que Stuart le regaló para ponerlo sobre la
carta, sólo para mayor comodidad; besé su frente y le desee buenas noches, ella
me sonrió y me dijo “Gracias por estar siempre aquí”, soltó una risita y salí
del cuarto... entonces entrada la madrugada mi madre me despertó, desorientado
miré a todos lados y escuchaba a mi tía llorar, me senté y mi madre sólo tomó
mi mano: “tu prima falleció, Oliver”. Sufrió una hemorragia interna que no se
detectó a tiempo.- Se sentó a mi lado y me abrazó-Lo siento mucho George.
-Alison...-
sollocé de nuevo y me negaba a pensar que no volvería a verla nunca más, la
mujer más hermosa que yo había besado en mi vida, la niña que creció junto con
nosotros y quien nos enseñó un mundo completamente diferente, se había ido para
no volver jamás.
¿Cómo iba yo
a superarlo? Pensaba en nuestras memorias y parecían lejanas, ahora inventadas
¿realmente hacía tanto tiempo desde la primera vez que nos besamos? ¿Desde la
primera vez que la vi?
Pasamos todo
el día en su casa, él sabía que yo necesitaba desahogarme y se sentó a mi lado,
la mayor parte en silencio y en sollozos, comentamos algunas cosas y me mostró
el anillo y la nueva carta, las guardaba en un cajón con llave y al fondo
estaba la pulsera que le regalé, le pregunté si podía quedarme con ella,
escribí una carta y se la di. Dadas las seis tuve que salir. Lavé mi rostro e
intenté cambiar el ánimo con unas cuantas bromas, tenía que ir a un bar cercano
donde había quedado de verme con los demás, Oliver me dijo que les pidiera que
lo visitaran en cuanto pudieran, estaría disponible para nosotros todo el día y
entendí a qué se refería. Salí y caminé con el alma y el corazón rotos pensando
en cuándo sería el día en que sanaría aquella gran herida. Entré al bar, pedí
una bebida, me senté cerca de una ventana y mientras pensaba en Alison comenzó
“Heartbreak Hotel” de Elvis, la canción que sonaba cuando vi a Alison en
aquella parada de autobús saliendo del colegio. Nuestra canción. Pronto vi que
los chicos estaban por cruzar la calle, sonrientes, esperando noticias de
Oliver y Alison, yo no sabía cómo decirles, por dónde empezar, era tan fuerte e
inesperado que sufrí al verlos sonreír porque sabía que les dolería igual que a
mí. Cómo demonios les diría, a aquellos esperanzados muchachos que aquel,
nuestro primer gran amor, no volvería
con nosotros a Liverpool nunca más.
...
Noooooo NO NO Y NOOOOOO. Debo reconocer que es un buen e inesperado final pero me diste totalmente en la puta madre...
ResponderEliminarQué triste que Alison muriera :( y también que chistoso aquel sueño con Stu... Que ya la estaba esperando... Al menos quedaron juntos en la eternidad 💔💔💔💔💔
QUEEEE?!?!? COMO LA VAS A TERMINAR ASIIIIII?!?!?
ResponderEliminarME ENCANTO JAJAJAJ
Que tristeza, mientras leía estaba escuchando a Phill Collins y me puse a llorar ... la melancolía.
Que tristeza... pero después me acordé de Stu y seguro están felizmente juntos como siempre quisieron.
Bueno espero el final de Something, te leo en otro momento.
Adiós a mi fic fav.... me voy triste.